Cómo hacer tu eCommerce más verde (y vender más)

Ecommerce Verde

Existe una preocupación cada vez mayor por el medio ambiente, esto es algo que está en la cabeza de los clientes. Tú, como responsable de una tienda online también debes dar un paso adelante y poner tu granito de arena para hacer un eCommerce más verde, más sostenible y aumentar las ventas desde la conciencia.

¿Por qué tu eCommerce debería ser eco-friendly?

En primer lugar porque es una tendencia global y muy positiva. Los comercios tienen un peso importante en la cantidad de contaminantes que genera una sociedad, por lo que tienen en su mano contribuir decisivamente a reducir el impacto derivado de su actividad.

Era importante recalcar esto porque no estamos queriendo decir que migrar hacia un eCommerce verde sea un argumento comercial, en realidad es más una consecuencia de hacer las cosas desde una determinada conciencia ética.

Los clientes han propiciado un nuevo modelo de consumo en el que se buscan los productos y las empresas que tienen una actitud medioambiental correcta y alineada con sus intereses. Parte de la experiencia de usuario radica en poner el dinero en una compañía que respete sus valores, con la que se pueden identificar.

Desde este momento, el usuario está dispuesto a cambiar sus prioridades. Entiende que una producción responsable tiene un coste superior, y parte de su posición ética ante el consumo está en asumir que se le repercuta parte de ese coste.

¿Qué sectores pueden englobarse dentro de esta categoría?

Aunque se suele vincular el consumo ecológico con el sector alimentario, esto no deja de ser un lugar común. Cada vez hay más y más negocios que han encontrado la forma de favorecer el medio ambiente. Veamos en detalle dos ejemplos, pero de una gran importancia, y luego entraremos en materia para demostrarte que cualquier negocio puede hacerlo.

Alimentación ecológica

Empecemos por ellos. Es cierto que el adjetivo «eco» o «bio» encaja muy bien con los alimentos. Cuando estos se producen de una manera sostenible, no se utilizan productos que puedan dañar el entorno ni a las personas. El mercado es muy sensible a ellos, los clientes se sienten más cómodos cuando saben que estos productos son mejores para la salud.

Según un informe del ministerio de Agricultura de España, desde 2014 el consumo de este tipo de productos experimenta un crecimiento de doble dígito llegando a representar un 1,7% del total del gasto en alimentación.

Todos los grandes fabricantes han ido aumentando su gama incluyendo productos bio pero, en algunos casos, han lanzado marcas exclusivamente ecológicas como puede ser Honest (de Coca-Cola) o WK de Kellogg.

Las marcas más representativas quieren subirse a un carro que saben que es ganador desde el punto de vista de un comercio emergente (hay una conversión directa que irá a más) y, en un plano algo más intangible, por una cuestión de blanquear una imagen que no siempre es muy positiva.

En el canal del eCommerce existen muchos ejemplos de diferentes empresas de alimentación que han optado por el modelo ecológico. Desde pequeños productores que han encontrado una vía en Internet para evitar distribuidores y generar un mayor beneficio a empresas especializadas como Naturaletha.

Cosmética

Al igual que en el caso del sector alimentario, en el cosmético existe una gran conciencia de lo ecológico. En parte esto lo podemos atribuir a que se emplean productos químicos y orgánicos.

Cada vez los clientes de productos de higiene y belleza se preocupan más por la huella que estos dejan en el medio ambiente en forma de residuos no biodegradables, vertidos, plásticos… por no hablar de los que experimentan con animales. Este es un tema tan delicado que ha llegado a propiciar la creación de un sello que certifica que los productos no han derivado de la crueldad con animales.

Los consumidores de cosméticos también tienen esa doble motivación de protección medioambiental y del propio organismo. Al fin y al cabo, cremas y maquillajes se aplican directamente sobre el piel, que no deja de ser el órgano más grande del cuerpo humano. Para muchos clientes de este tipo de eCommerce es vital que la cosmética sea lo más natural posible para no utilizar químicos tóxicos que perjudiquen su salud a largo plazo.

Ejemplos al respecto hay muchísimos porque esta tendencia no para de crecer. Marcas como Cocunat a nivel nacional (interesante la historia de cómo su fundadora comenzó a emprender ante la enfermedad de su madre) o los tarraconenses de Freshly Cosmetics.

¿Cómo pueden ser verdes el resto de los eCommerce?

Si tu nicho no está entre estos, aún puedes hacer mucho porque tu tienda online sea eco-friendly. Siempre se puede actuar en diferentes aspectos de la empresa adoptando una filosofía sostenible.

#1 – El producto

Si eres fabricante busca la forma más eficiente de producir tus productos. Asegúrate de estar utilizando la energía necesaria y no más. En ocasiones hay que apostar por realizar una inversión algo mayor para tener maquinaria con un alto nivel de eficiencia energética.

Comprar este tipo de máquinas es más caro a corto plazo, pero a cambio representa un ahorro anual en energía que, durante su vida útil, supone una cifra bastante importante.

En cuanto a las materias primas también es muy importante que busques a proveedores de proximidad siempre que sea posible. Imagina la cantidad de CO2 que ahorras cuando te sirven desde un almacén a 20 kilómetros en una furgoneta con respecto a lo que supone recibir envíos desde el otro lado del mundo vía aérea. Esto también se aplica cuando vendes productos manufacturados.

#2 – Logística

De todas formas, lo de buscar proveedores locales puede resultar un poco idílico. Ya sabemos que muchos venden desde economías emergentes. En el caso de no ser viable buscar un proveedor nacional, trata de planificar con mucho cuidado los envíos para realizar solo los imprescindibles. No solo se ahorra dinero, también se reduce la huella de carbono.

Por otra parte, siempre hay medidas adicionales que podemos tomar. Desde hace años es bastante común encontrar empresas de paquetería que utilizan medios no contaminantes como vehículos eléctricos o bicicletas. Incluso grandes operadores como SEUR tienen en sus flotas vehículos propulsados por energía limpia como el GNC y GNL (gas natural y licuado).

¿Se puede repercutir este coste al cliente? Es cierto que estaremos incurriendo en gastos un poco más elevados o, en determinados casos, el servicio no será tan rápido como los compradores de tu tienda están habituados. Si les informas de la naturaleza de este servicio, en su posición ética, puede que decidan optar por una alternativa más cara o asuma un tiempo de espera mayor.

#3 – Packaging

Uno de los puntos claves de todo eCommerce sostenible está en la cantidad y tipología de material que utilizan para realizar el embalaje de sus pedidos. Es muy fácil caer en lo cómodo y no darle demasiadas vueltas a esto, pero optando por otro tipo de materiales y técnicas estaremos aportando nuestro granito de arena a reducir la cantidad de vertidos y deshechos.

El mercado cada vez nos ofrece alternativas más interesantes como el llamado green packaging o empaquetado verde. Estas tendencias se basan en emplear materiales sostenibles para embalar los pedidos pero también en un uso más razonable del espacio.

Utilizando cajas más compactas ahorramos cerca de un 40% del espacio tanto en nuestros almacenes como en las furgonetas de transporte. En ambos casos el metro cúbico es dinero que tenemos que pagar al almacén o a la empresa de transporte, pero en el caso del reparto estamos llenando antes los medios de transporte con lo que incrementan la cantidad de viajes y con ello la huella de carbono.

Además de todo esto, y aunque resulte intangible, comunicar a nuestros clientes que utilizamos un empaquetado respetuoso con el medio ambiente es transmitir un mensaje de responsabilidad que potencia nuestra marca.

¿Qué medidas puedo tomar? Pues algunas como:

  • Utiliza materiales biodegradables: o incluso compostables (que pueden ser convertidos en compost o abono orgánico). En la medida de lo posible siempre será mejor el papel y el cartón que el plástico.
  • No mezcles materiales: incluso aunque utilices material 100% reciclable no olvides que los adhesivos suelen ser plásticos y la tinta contamina notablemente (afortunadamente existe la tinta de soja para estos casos)
  • Busca opciones reutilizables: si tus envases son lo suficientemente atractivos en cuanto a diseño o pueden utilizarse para un segundo uso, los usuarios los guardarán y emplearan para otros usos.
  • Zero waste: esta es una tendencia muy en boga. Consiste en reducir a la mínima expresión la cantidad de deshechos procedentes de paquetes y embalajes. ¿Un ejemplo? Los desodorantes y champúes sólidos que venden en tiendas como Luffa, básicamente son pastillas que se aplican de manera directa y no tienen envase más allá de un envoltorio de papel.

#4 – Instalaciones

Una empresa 100% digital suele tener menos gastos que una red de tiendas físicas por razones obvias. De todas manera una oficina también consume energía y genera residuos.

En primer lugar está el alumbrado, así que procura utilizar bombillas eficientes como las de LEDS. Ya no hay en el mercado bombillas incandescentes, pero sí halógenas que consumen un 80% más que los LEDS.

La calefacción también es un punto bastante crítico. Lo ideal es poner un climatizador y mantener una temperatura razonable y de confort todo el año.

Es importante que apagues los equipos informáticos cuando no estén en uso. Se estima que 5 ordenadores encendidos cuando no estamos en la oficina estamos derrochando unos 400 euros al año de energía.

Otra medida básica es reciclar tanto consumibles como equipos. No tires a la basura nada que pueda ser susceptible de reutilizarse. En cuanto a consumibles también es interesante el utilizar el mínimo papel posible y a ser posible reciclado.

#5 – Responsabilidad Social Corporativa

Por mucho que nos propongamos limitar el impacto que causamos a nuestro entorno, es inevitable generar unos ciertos mínimos.

Llegados al punto en el que, objetivamente no podemos reducir más estas circunstancias, todavía nos queda una baza más que jugar y es una que les encanta a los clientes: la llamada responsabilidad social corporativa.

Básicamente consiste es realizar acciones como empresa que ayuden a retribuir a la sociedad y la comunidad parte de nuestros beneficios. De algún modo es como si los clientes acometieran una acción cívica a través de nosotros al realizar la compra.

No todas las causas a las que se da soporte tienen que ser necesariamente vinculadas al medio ambiente, pero encontramos muchos ejemplos de eCommerce verdes a través de sus acciones de responsabilidad social corporativa.

Ya hemos hablado de Freshly Cosmetics y sus productos de cosmética natural, pero lo que a lo mejor no sabes es que con cada compra superior a 50€ estás contribuyendo con 1€ a la plantación de un árbol en su proyecto de reforestación llamado Mi Bosque.

La marca de ropa de Pact no «solo» realiza sus prendas con algodón 100% orgánico y apuesta por el comercio justo. También tiene programas dedicados a la protección del medio ambiente y las explotaciones de algodón responsables.

Pero no todo son empresas de pequeño y mediano tamaño, incluso las más grandes son conscientes de lo importante que es la sostenibilidad. Sus clientes les demandan que actúen y ellos recogen el guante. Aquí podríamos hablar, por ejemplo, de Electrolux que hace años creó una fundación destinada a iniciativas que hagan del planeta un lugar mejor y que está alineada con los objetivos que plantean las Naciones Unidas para el desarrollo sostenible.

Incluso Amazon tiene su programa Smile en Estados Unidos. Puede que no sea muy conocido, pero gracias a él, se realiza una donación del 0,5% de tu compra de determinados productos a una de las asociaciones vinculadas a este proyecto (asociación que tú puedes elegir entre un enorme listado).

Lo importante es que, sea cual sea el tamaño de tu empresa, todos seamos capaces de buscar la forma de contribuir de manera proactiva a mejorar el planeta y la calidad de vida de las personas que lo habitamos (y lo habitarán en el futuro).

Se valora mucho por parte del mercado la implicación en las causas desde la filosofía de empresa a la logística pasando, desde luego, por la producción responsable. Los clientes cada vez valoran más estos aspectos y lo demuestran en su comportamiento de cara a la compra.

Y tú ¿qué haces para que tu eCommerce sea verde? Cuéntanos tus iniciativas en los comentarios de este post o en nuestras redes sociales.

One thought on “Cómo hacer tu eCommerce más verde (y vender más)

  1. Uno de los grandes aliados para el e-commerce ecológico es el sistema dropshipping, se reducen mucho las emisiones. Aun así, aquellos que quieren ofrecer un trato muy personalizado no se pueden plantear esta opción ya que necesitan un control total del proceso y el producto a de pasar por sus manos para personalizarlo.

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