¿Qué Puedo Encontrar Aquí?
Se dice y se repite que el contenido es el rey pero, sinceramente, sino hay un buen content curation puede que llegue a ser ni el aspirante al trono del país de los ciegos. No te tires de cabeza a publicar contenido por publicarlo, dale una vuelta a la estrategia y elige solo lo que de verdad vaya a marcar la diferencia y aportar valor.
¿Qué es el content curation?
Empecemos aclarando el enésimo concepto en inglés. La verdad es que se suele traducir como curación de contenido pero no suena demasiado bien.
Se trata de un procedimiento por el cual se rastrea, filtra, organiza y difunde el contenido más relevante de múltiples fuentes. Es una manera de aportar valor basándonos en el contenido de terceros, pero también una forma de procedimentar y catalogar la información a nivel interno para desarrollar nuestras propias piezas de contenido.
Curación del contenido y eCommerce
El marketing de contenidos es muy relevante, de acuerdo, pero también conlleva el uso de muchos recursos (dinero y tiempo). El gestionar un eCommerce ya consume mucho tiempo por sí mismo así que, dependiendo del tamaño de la empresa, es fácil que tendamos a buscar otras estrategias que no nos condicionen tanto y tengan un retorno más rápido.
Precisamente pensando en aquellos que no tienen el tiempo o los recursos para implementar una estrategia de contenidos basada en la producción propia del material pero no quieren renunciar a los beneficios del marketing de contenidos, el content curation puede representar una buena oportunidad para generar tráfico y relevancia utilizando contenido de terceros que aporta valor para nuestros seguidores.
De alguna forma estaremos trabajando nuestro branding, aportando valor a nuestra comunidad -lo que redunda en un crecimiento de la misma, tanto en las redes sociales como a nivel de suscriptores de nuestro email marketing- y nos ayuda a definirnos dentro de nuestro nicho como expertos.
Cómo hacerlo
Como decíamos, es un proceso que tiene varias fases. La operativa es más o menos sencilla, pero puede llevar bastante tiempo hacerlo bien.
- Recopilación: este es el momento de empezar a almacenar el material. La clave está en las fuentes que elijamos porque cuanto mejores sean, mejor será el contenido y más simplificará el resto del proceso. También te recomiendo que entre las fuentes elijas algunas fuera de lo común, así tu content curation se desmarcará del sector.
- Filtrado: evidentemente estamos partiendo de un trabajo en bruto. Es el momento de recoger solo aquello que pueda aportar valor y lo que se adapte a nuestra estrategia, objetivos y tono de comunicación.
- Clasificación: podríamos incluir la clasificación dentro del proceso de filtrado, pero lo cierto es que tiene bastante peso por sí misma. Es el sub-proceso en virtud del cual categorizamos las piezas de contenido relevante en áreas de interés para poder acceder a ellos de manera organizada.
- Producción: sí, ya habíamos dicho que aquí el trabajo era menor, pero no inexistente. Hacer content curation no es listar un montón de enlaces y ya. Para implementar correctamente esta estrategia la clave está en darle un valor y un formato personal en el que se vea el sello de la marca (¿un post en nuestro blog corporativo?, ¿un newsletter? ¿las dos cosas?), poner algo nuestro dentro del contenido.
- Calendarización: una vez que tengamos claro el contenido, el formato y hayamos preparado las piezas tenemos que buscar el mejor momento para difundirlas. Para esto nos ayudará mucho llevar un calendario editorial y ser metódicos definiendo: día de publicación, formato, responsable, fuentes y materiales adicionales.
No añado la fase de difusión porque se da un tanto por sentada, ya no es una cuestión de content curation sino de estrategia de comunicación, con lo que entraría en otra área estratégica.
¿Qué tipo de contenido?
Te diría que cualquiera que sea de interés para tu público. Imagina que tienes una tienda de artículos para motoristas. Pues ponte en la piel de tu público y piensa en todo lo que les interesa. Puedes ir desde la mecánica a las carreras pasando por rutas para hacer en moto o temas más tangenciales pero que pueden resultarles interesantes como películas sobre moteros.
A la hora de pensar en formatos hay algunos que siempre funcionan. De hecho, hay páginas tipo Buzzfeed que tienen enormes volúmenes de tráfico utilizando siempre fórmulas muy sencillas.
Las recopilaciones de enlaces siempre están bien (puedes jugar con la actualidad o con información muy segmentada para tu nicho), pero asegúrate de ponerles tu sello. Haz un breve resumen, aporta algo de opinión y tu propio tono de comunicación porque ahí es donde estará la diferencia.
No descartes las encuestas. Recurrir a los expertos del sector, gente con influencia para tu público objetivo y pasarles un breve cuestionario te servirá para ofrecer contenido de relevancia, aportar tu perspectiva a través de las preguntas y, por qué no decirlo, un poquito de ego-baiting porque cuando citas a alguien será más sencillo que mueva tu contenido entre su comunidad.
Algunas herramientas de curación de contenidos
Mi recomendación es que utilices alertas para temáticas y keywords concretas como Google Alerts y lectores de feeds RSS como Feedly, esto te ayudará en la fase de recopilación. También puede ser interesante monitorizar las redes sociales como Tweetreach que además te servirá para identificar quiénes son los que tienen una mayor influencia en determinados topics.